El gran día

He podido dormir toda la noche, cosa rara, teniendo en cuenta los nervios que tenía, me levanto temprano y desayuno unas tostadas con pavo y un yogurt. Me tumbo un rato para hacer la digestión y esperar que me entren ganas de cagar, mientras veo el inicio de temporada de formula1.

Después de esto llega el momento del ritual tan esperado y estudiado, cremita fisiocrem en todas las piernas, geles, dorsal y muchos, muchos nervios!! Dejo la llave en recepción y con un poncho de los chinos para el frío salgo a la calle… el ambiente que se respira es de nervios, gente calienta, estira, otros se sientas en un escalón con la mirada perdida, los que van en grupo no dejan de bromear, en los ojos de la gente se reflejan miedos, ilusiones, dudas… estamos a punto de cumplir un reto, de cumplir un sueño, pero no todos lo lograremos.

Llega la hora de entrar en el cajón de salida y me toca en el que está en “Pekín” ya que en la inscripción puse que correría en mas de cuatro horas, la salida se reparte en cinco pistoletazos, cinco salidas diferenciadas según las liebres que hemos de seguir así que nuestra salida suena a casi las nueve, Boom!! Salimos! Los corredores aplauden i empezamos a respirar mas tranquilos aunque corriendo, mas de 42 km nos esperan por delante 26,2 millas.

Al principio los corredores van hablando y comentando el buen ambiente y la buena organización del evento entre otras cosas, yo estoy callado y alucinando con la espectacularidad del momento. No se como explicar lo que es estar allí.

En el Km dos un gran badén deja ver una larguísima cola de gente que recuerda a esas manifestaciones masivas que por desgracia se ven a menudo, de mucho mas buen rollo.

Empiezo a destensarme y me siento mucho mas cómodo y confiado, creo que demasiado confiado, voy a muy buen ritmo y eso me pasará factura… Novato!!... adelanto al globo de las cuatro horas, alucino con la cantidad de frikis que llegan a apuntarse a un maratón, gente disfrazada, gente con banderas para que quede claro que son de otro país, otros corren con mochilas…

La cosa se va a poner durilla antes de llegar a la media maratón, colocan el km 21 en la cima de una subida que me deja el pie, el famoso pie de la lesión, para el arrastre, con un dolor que casi me obliga a correr cojeando y eso me ralla un poco, ya no estoy tan valiente… En la bajada puedo descansar un poco el pie y afloja el dolor en contrapartida un flato intenso me ataca el estomago, supongo que los nervios no me dejan digerir bien el par de geles que llevo ingeridos, se me pasa rápido y hasta el km 28 todo va bien, vuelvo a disfrutar del momento, el público anima, los niños alargan la mano para que les choques la tuya, hay escenarios por la calle con conciertos en directo que tocan canciones motivadoras tipo Dire Straits o Final Countdown de Europe, batukadas, etc…

Pasado el km 31 un ligero mareillo me viene a visitar y me veo obligado a bajar el ritmo al rato noto una avalancha de corredores que se dispone a adelantarme, me doy la vuelta y es el globo de las cuarto horas!! Mierda!! Hasta este momento estaba convencido que la podía correr en menos de cuatro horas, decido acoplarme a toda esa gente, que iva gritando y animando pero no me adapto, demasiada aglomeración para estar medio mareado mucha gente llega a agobiarme pero en vista de que no los podré adelantar decido quedarme un poco atrás.

Vuelvo a correr cómodo aunque a un ritmo mas bajo, me convenzo de que no acabaré en menos de cuatro horas pero voy a llegar, el público cada vez anima mas, llegamos a la zona marítima y la calor empieza a pasar factura, mucha gente se retira, otra mucha deja de correr y empieza a caminar, eso no ayuda, moralmente ver a esa gente llorando por no poder acabar su reto ralla un huevo, la idea de que pueda pasar a mi me hunde y en ese momento es cuando el famoso muro me pega fuerte en los morros, es como una guerra, como si alguien te intentara convencer de que dejes de correr, que demonios haces? No estarías mejor en el sofá de casa? No me jodas!! Mirate que pinta tienes colega!! Por otro lado pienso, después de todo lo pasado, entrenos, lesiones, dietas… si yo y mis cojones hemos llegado hasta aquí vamos hasta el final!! A muerte!!

Es duro, durísimo, jamás habría imaginado que esto era así, había mirado videos en Youtube, leído entrevistas de como era la experiencia de correr un maratón, pero hay que vivirlo para darte cuenta que lo duro es la guerra psicológica mas que la física, al menos en mi caso o al menos en este punto de la carrera, mas adelante convencido de voy a acabar, en el Km 39 las piernas me arden y no puedo comer mas geles porque noto nauseas, creo que aunque solo me quedan tres kilómetros noto que no llego, al menos no llego corriendo, pero me niego a pasar por la línea de llegada andando, así que decido caminar aunque solo sean 300 metros y poder llegar corriendo, pero cuando te paras a caminar la gente lee tu nombre en el dorsal y te animan a ti, te repiten que ya lo tengo, que el maratón es mío, que soy un héroe, un campeón y cuando cien personas te piden que corras, que vas hacer? Pues correr, levantar la cabeza para no perderte ni un solo segundo de ese momento, un momento que voy a recordar toda mi vida y quiero pode explicarlo orgulloso a mis hijos cuando sean mayores, la verdad es que se hace eterno, creo que esto me ha hecho mas fuerte y que a partir de ahora voy a afrontar mis retos y mis problemas con mas cojones que antes!!

Ay está, el primer arco de llegada, la gente grita entusiasmada, no quiero ni imaginar la cara que hago, pero corro, no voy a dejar de correr me repito en cada momento, un escalofrío me recorre el cuerpo, ya no me duele nada, no voy a llorar, no voy a llorar, no voy a llorar, paso por el último arco de llegada y una liberación me hace descargar momentos de rabia dando puñetazos al aire gritando “toma!! Toma!!” segundos mas tarde me siento un momento en el suelo y me echo a llorar, lo he conseguido!! Ya soy un maratoniano!! He sido un héroe durante un día!! Y lo voy a recordar toda mi vida!! Después de todo he disfrutado, ha valido la pena y no descarto repetir esto algún dia, soy un poco mas feliç i creo que pocas veces me he sentido orgulloso de mi.

No quiero acabar esta entrada sin compartir este premio con mi mujer y mi familia, sin ella y sin su apoyo en los momentos difíciles no lo hubiera conseguido, y a mi hermano, es un entrenador y un compañero cojonudo. Os quiero!!!